Un equipo extra, profesional y cualificado, que conoce el oficio y dedica el 100% de su tiempo a ello. Eso supone una agencia de comunicación.

Muchas empresas creen que pueden gestionar la comunicación no sólo sin una agencia de comunicación, sino sin, ni siquiera, un profesional cualificado. «Total, si comunicar (hablar, escribir…) sabemos todos«. Esta es una de las grandes falacias de los negocios de hoy en día: creer que, porque tenemos el mundo al alcance de nuestro móvil cualquiera está preparado para lanzar mensajes en él.

«Si no contratarías a tu amigo el instagramer para hacer las fotos de tu boda, ¿por qué lo haces con tu negocio?»

Imaginemos que queremos las fotos de nuestra boda. ¿Se las encargarías al amigo que hace fotos estupendas para Instagram? ¿A que no? Seguro que, por buenas fotos que haga ese amigo con su móvil, contratarías a un fotógrafo profesional para el gran día. ¿Sabes por qué? No sólo porque tenga una cámara estupenda. Sino porque se dedica a ello, a diario, y ha hecho de los grandes días de la gente su oficio. Se adelanta a posibles errores, está prevenido por si llueve, lleva un equipo consigo, corrige y retoca, y te da la mejor calidad. Por no decir que así, tu amigo puede dedicarse a lo que tiene que hacer en la boda, que es disfrutar contigo. Lo mismo ocurre cuando nos planteamos o no contratar una agencia de comunicación.

agencia de comunicación Presscode
Agencia de comunicación en Madrid, Presscode

Si dejamos la comunicación en alguien a quien, simplemente, se le da bien, pasará mucho tiempo hasta que haya desarrollado los conocimientos necesarios para cuidar de tu negocio con profesionalidad. Será más barato (no siempre), pero también le estarás pagando la formación. En una agencia de comunicación, esta persona que no conoce este sector desde el lado profesional contaría con un equipo de apoyo, jefes que le guiaran y compañeros que le salvasen de algunos «marrones».

Por otro lado, si ponemos al frente de la comunicación de una empresa a alguien relacionado con la comunicación, como marketing o comercial, no sólo haremos que esa persona deje en parte de hacer su trabajo (que es vender), sino que la quemaremos… y no hará al 100% ninguna de las dos cosas. Por no decir que, una vez más, la formación en marketing es muy diferente de la de comunicación.

Si has llegado hasta aquí, vamos a darte unas cuantas ideas de por qué te viene bien una agencia de comunicación:

  • Tú (o tu director comercial) podréis seguir dedicándoos a lo vuestro: vender y hacer crecer la empresa.
  • Tendrás un equipo de apoyo. Más de una persona que analiza y cuestiona, compara y busca la mejor solución.
  • Son profesionales cualificados, formados especialmente para comunicar (por ejemplo, te contamos la profesión del community manager aquí).
  • Serán profesionales que conocen el oficio al 100%. Cada detalle del día a día, los trucos, atajos y demás. Y eso va en tu beneficio.
  • La agencia de comunicación se encarga de actualizarse, de estar al día de las novedades y tendencias. Están constantemente aprendiendo.
  • Tendrán ya herramientas de apoyo contratadas, que conocen bien y que saben optimizar.
  • Tienen otros clientes de los que aprenden, y pueden ayudarte a implementar nuevas estrategias.
  • Son externos y van a mirar tu negocio con el mismo prisma que tus clientes: desde fuera. Sabrán decirte lo que haces mal y potenciar lo que haces bien.
  • Siempre se van a esforzar para conseguir que estés satisfecho, porque quieren que sigas confiando en ellos.
  • Porque es más económico de lo que imaginas, y tienes la ventaja de hacer contratos por proyectos, o que puedes disolver sin un compromiso laboral. Y si no, al menos, pide un presupuesto ¡que es gratis!

¿Y si ya tengo un director de comunicación, necesito agencia?

Pues a veces sí, a veces no. Depende de varias cosas:

  • De la estrategia: el es director de comunicación quien tiene que implementar las diferentes herramientas en una: relaciones públicas, redes sociales, publicidad, BTL… pero él no puede ejecutar todo el trabajo.
  • Del volumen de trabajo que haya: hay veces que sí se tiene un equipo interno bien preparado, pero en algunos momentos la carga de trabajo hace necesario subcontratar a una agencia de comunicación que ayude a sacar proyectos adelante.
  • De que sea realmente el director de comunicación, y no un director de marketing, un diseñador gráfico, o un administrativo reciclado. Nadie es experto en todo, así que esta persona podrá ser un buen enlace interno, pero no puede desarrollar varias profesiones a la vez.
  • Del contenido: hay contenido que es exclusivamente interno, y que no puede gestionarse desde una agencia de comunicación. Del mismo modo que la agencia, al ser externa, ve cosas en las que el cliente no se había fijado.
  • De la ubicación. ¿Qué queremos contar y a quién? Tal vez si somos un negocio local pero queremos llegar a medios nacionales haga falta una agencia allá donde estén los medios. O viceversa.

¿Sigues sin saber por qué necesitas una agencia? Si quieres, puedes escribirnos, nos conocemos en persona y te lo contamos. Aunque,claro, igual te convencemos de que nos contrates… 🙂